Nadie es perfecto, y yo menos que nadie, desde luego. Y no lo digo por darle al topicazo, no... Yo y todo lo que hay a mi alrededor es imperfecto de manera notable. Mi mente elimina, destroza la perfección a mi alrededor. La desintegra como un monstruo devorador de realidades de un cómic cualquiera. No diré que no existan esos momentos perfectos de que todo el mundo disfruta de vez en cuando (o deberian), sino que incluso esos momentos pierden su perfección, porque a menudo acaban teniendo algun tipo de efecto o consecuencia negativa en mi. Y vaya mierda de perfección si luego viene dando por culo...
No hagais caso, sólo algo que me ha pasado por la cabeza justo antes de eterme en la cama, y he querido escribir. Probablemente no sea verdad.
Buenas noches!
(No dejeis de leer la entrada anterior, que he posteado dos veces el mismo dia)
1 comment:
la gràcia està en la imperfecció del moment, superant la realitat a la ficció del moment perfecte...fer-lo imperfecte fa el moment molt més interessant, molt més humà, impredible
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